El hotel tiene una arquitectura impresionante y

cada rincón está diseñado para ofrecer una experiencia única y lujosa. La habitación que elegimos era encantadora y contaba con una piscina privada perfecta para relajarse. Sin embargo, el personal entraba a la habitación sin previo aviso, lo que resultó un poco incómodo.

experiencia de lujo junto a la piscina privada

instalaciones increíbles, desayuno impresionante

algunas áreas compartidas con tráfico

Atención excepcional, decoración moderna, vistas impresionantes – una experiencia inigualable.

El hotel es un verdadero espectáculo. Desde el momento en que llegamos, el personal estuvo muy pendiente de nosotros. incluso nos sorprendieron con un pastel de cumpleaños y globos, lo que fue un detalle encantador. La suite que elegimos tenía una iluminación impresionante, con la piscina iluminada que le daba un toque mágico. Cada detalle en la decoración es cuidadoso y realmente vale la pena. Me encantó poder disfrutar del desayuno. Había tantas opciones disponibles, desde yogur fresco hasta delicias griegas auténticas, todo exquisito. La experiencia de la cena en el restaurante tuvo un nivel similar, con platos que reflejaban calidad culinaria sin comparación. Sin embargo, había un par de detalles a mejorar. La privacidad en nuestra habitación dejaba un poco que desear, ya que el personal podría entrar sin previo aviso por el balcón. consideraría las vistas, ya que no eran tan espectaculares como esperaba, solo veíamos una calle. Aunque la habitación era moderna y cómoda, la falta de privacidad fue algo incómodo. A pesar de ello, disfruté completamente de mi estancia y de la atención prestada, lo cual es muy importante en un lugar así.

Inmejorable experiencia, cuarto espectacular con piscina privada y vistas de ensueño. Atención del personal de diez, siempre amables y dispuestos. El desayuno, una delicia! Ideal para desconectarse y disfrutar de un momento único. Volvería sin dudarlo.

Las barras de desayuno son un espectáculo! Todo fresco y sabroso, con opciones que van desde yogur con miel hasta esas delicias griegas que hacen bailar a las papilas. Además, el hotel es hermoso, con instalaciones increíbles y un toque romántico, ideal para momentos mágicos con amigos o en pareja.

Mientras disfrutábamos de nuestra villa con piscina, notamos que el personal entraba sin previo aviso. Un poquito incómodo, especialmente considerando la privacidad que uno busca en un lugar así. Además, que te sugieran dejar propina al final, después de ya haber dado, puede ser un poco extraño.

El desayuno fue uno de los mejores que he probado, con una variedad enorme que incluyó delicias locales. La atención del personal fue increíble, siempre dispuestos a ayudar y hacernos sentir especiales.

La privacidad en la habitación podría ser mejor, ya que el personal a veces entraba sin avisar.

Hotel hermoso, vistas al atardecer impresionantes y un ambiente romántico. La suite tenía un jardín privado perfecto para relajarse y disfrutar de una comida al aire libre.

El personal entra sin avisar a la habitación, bastante incómodo, como tener un espectáculo inesperado.

Ideal para escapadas románticas

La atención del personal fue del diez, siempre estaban sonriendo y hacían todo lo posible por ayudarnos. La vista desde nuestro balcón era mágica, el atardecer era algo que nunca olvidaré.

No era barato, pero sinceramente valió cada céntimo en la experiencia.

A Vistas impresionantes
B Personal excepcional
C Desayuno delicioso

A Privacidad comprometida
B Personal entra sin aviso
C La comida a veces fría

Un lugar impresionante con atención excepcional

El hotel es simplemente hermoso. cada rincón estuvo diseñado con detalles que enamoran. Los desayunos son deliciosos y ofrecen una variedad de opciones que realmente destacan, desde pasteles hasta exquisiteces griegas. Además, la atención del personal es de primer nivel, siempre dispuestos a hacer tu estancia perfecta, incluso celebraron nuestro cumpleaños con una sorpresa encantadora. Sin embargo, la privacidad en la habitación fue un poco incómoda, ya que el personal podía entrar sin aviso previo.